Seas el cambio que quieres en el mundo dice el dicho. Pero este mundo, nos es mas y mas complejo, irrigado mas por los canales de información que canales de agua potable, abonado masivamente mas por los fertilizantes petroquimicos que por las ideas de los hombres. Como construirse en un mundo tal cual ? que sentido dar a su vida para no tener la impresión de existir solo para si mismo pero también para el bien común, el bien de este mundo que se nos escapa. Algunos en un momento de sus vidas, deben responder a esta necesidad que nace desde lo profundo de su ser, partir para explorar el mundo que lucha, el mundo que intenta re-conectar los hombres con su tierra, que se eleva como un muro contra la entropía inevitable, mal de una sociedad que esta a punto de ahogarse. Porque ninguna fuerza actúa impunemente. Las leyes de la naturaleza equilibran maravillosamente el acción y la reacción. Nuestro mundo esta repleto de iniciativas salvadoras, actuando a espaldas de los medias, vinculando una realidad de consumismo. Porque el peligro esta en todos los lados : perdida de la biodiversidad animal o vegetal, contaminación masiva de la biosfera, la deforestación….la respuesta dada es amplia, las luchas se manejan a todas las escalas, del país al barrio, del continente hasta las casas de la simple gente. Aqui re-aprendemos a producir nuestros alimentos y enseñamos a la nueva generación la cosa que crece, la cosa que vive y que nutre. Aqui, luchamos contra la invasión de las tierras únicas en el mundo donde la flora que valiosamente vive en la neblina durante una estación, quien esta aclamada como el milagro de un niño que acaba de nacer. Acá es aquí. Aquí las montañas que nos rodean son pedazos de luna perdidos. Templo de polvo donde la vida ya no es bienvenida. Neblina y niebla que se mezclan, impidiendo distinguir lo que viene del mar y lo que viene del niño asmático, tosiendo sus partículas toxicas en una ciudad tentacular, cubriendo de noche un pueblo que se adormece. En estas montañas desnudas sobreviven en un oasis aun virgen de los vestigios del pasado del cual el futuro ya no esta. Planta valiente, almacigo valiente, semilla épica y raíz poderosa no pueden frente a la locura de los hombres que brindan a la dominación del mundo, emborrachándose hasta vomitar del liquido carbono con el sonido de las monedas que se acumulan sobre la carcasa muerta de nuestro mundo. Lomas, ecosistema único y igual de frágil que le corazón de un hombre que ama, en equilibro estable tan generado de una increíble belleza pero también capaz de borrarse como el soplo, imagen de dos posibilidades donde cada voluntad cuenta en este combate del equilibrista. Voluntad. La de un hombre y de una mujer que deciden crear vida, olvidando los atributos de nuestra especie, usan su corazón, bomba vital y centro del inquebrantable, de la rabia de vencer. Irrigan de su sudor esta tierra que creíamos muerta, de su voz apacible, despiertan los espíritus, ancestros honoríficos o conciencia de partículas, levantando como generales tropas de soldados, corriendo al combate convencidos de la pureza del acta, de la justicia de la acción. Pero la tierra recia, ofreciendo a los inconscientes sus tormentas de arena, el calor sofocante de un desierto árido, tal como el soplo caliente de una boca volcánica. La mano puesta en este sol radiante, arrodillado en este polvo pérfido, humedeciendo una ilusión de sus labios resecos. Es el relajo, el agua aliado, se escapa en vapor frente a tanta violencia, quitando los jóvenes brotes de su leche maternal. La lucha es desigual, pero la voluntad consciente no puede fallar, arquitecto de un futuro verde. Entonces empezamos de nuevo, cargando a punto de brazos estos litros preciosos, tratando de convencer a esta tierra de acoger en su vientre, sus compañeros que pensaba olvidados por siempre, dando a los hombres cercanos la visión policroma de un paisaje preservado Pero la tierra recia, ofreciendo a los inconscientes sus tormentas de arena, el calor sofocante de un desierto árido, tal como el soplo caliente de una boca volcánica. La mano puesta en este sol radiante, arrodillado en este polvo pérfido, humedeciendo una ilusión de sus labios resecos. Es el relajo, el agua aliado, se escapa en vapor frente a tanta violencia, quitando los jóvenes brotes de su leche maternal. La lucha es desigual, pero la voluntad consciente no puede fallar, arquitecto de un futuro verde. Entonces empezamos de nuevo, cargando a punto de brazos estos litros preciosos, tratando de convencer a esta tierra de acoger en su vientre, sus compañeros que pensaba olvidados por siempre, dando a los hombres cercanos la visión policroma de un paisaje preservado.
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