Creemos que los grandes cambios se hacen siempre desde las bases, en este caso la base es humana, alegre, vivaz y curiosa. Nos vemos atacados de muchas preguntas de los pequeños gigantes humanos, que nos dan cátedra de grandes respuestas que nos dejan con la boca abierta. Estas respuestas son sabias, envueltas en pequeños seres que vienen a refrescarnos la memoria. CEAH, inició la primera semana de enero 2016, los talleres de verano para los pequeños. El único taller exitoso de los cinco que presentamos fue el de jardinería (2 alumnos y tres profesores) sabemos y creemos desde el corazón que esos dos pequeñ@s son la antena de dos mil niñ@s de la zona, que algún día estarán en las lomas sembrando y cuidando algo que es de todos “La Pacha Mama” (madre tierra). Alimentamos la reconexión y la apertura del corazón, con una sola actividad que es el sembrado y el famoso ciclo de la vida natural. La vida se abre en cada clase, en cada momento, donde vemos como ensucian sus manos, como preparan compost o como hacen sus almácigos. Vemos a Abel y Alejandra tirando los desechos orgánicos en uno de los hoyos que tenemos habilitado. Nos llama la atención ver como ellos sin decirles nada comienzan a trocear con las manos los desperdicios orgánicos. - Chicos, ¿porque están cortando con las manos los desechos? Abel sin dejar de hacer la actividad y con total naturalidad respondió. - Obvio, para que se descomponga más rápido y así podemos obtener compost. Un pequeño silencio de aprobación y de miradas cruzadas inundó el lugar. Sin duda nos encontramos con grandes conocedores de la tierra. Nuestra labor es sencilla y abierta no solo para los pequeños si no para el mundo entero y sabemos la importancia del Aprender, Desarrollar y Compartir. Equipo CEAH en acción
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Abril 2017
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